Hemos estado aquí antes, ¿verdad? Cuando se lanzó Twitter, se decía que era puro contenido tedioso. Luego cuando se lanzó Instagram se decía que era para los vanidosos. Cada vez que una red social nueva genera posicionamiento, hay una ola de personas que la descarta, y luego cuando se quieren subir al tren ya es tarde. A veces tienen razón: Snapchat, por ejemplo, nunca generó interés más allá de su audiencia de nicho. TikTok, sin embargo, es distinto.